Esta publicación comprende dos estudios: el primero llamado “Funciones sociales del salario mínimo” pretende responder una pregunta que pasa por la mente de muchos colombianos/as: ¿el salario mínimo realmente puede garantizar una vida digna? Los resultados de la investigación arrojan que esta remuneración no permite cubrir los gastos básicos, lograr el avance social y aprendizaje y, por lo tanto, no lleva a salir de la trampa de la pobreza. Por estas razones, el salario mínimo no es un incentivo para dar el paso de la informalidad hacia la formalidad laboral.
Precisamente la segunda investigación llamada “Informalidad laboral: hacia una política de inclusión centrada en la productividad” consiste en una radiografía de las personas que permanecen en la informalidad en Colombia. Específicamente se refiere a quienes afecta más este fenómeno de acuerdo con su edad, género, educación y ubicación geográfica, entre otras. También, aborda las causas y consecuencias de esta problemática en el país.
Cada estudio incluye recomendaciones de política pública por parte de Cuso International, entre las cuales se destaca la necesidad de políticas de productividad ancladas en iniciativas regionales de generación de empleo formal y digno.