Cuando Clara Inés Castaño Cortés perdió su trabajo, no estaba segura de cómo iba a mantener a sus hijos pequeños. Para sobrellevar esta situación, recurrió a la repostería como una forma rápida de ganar algo de dinero. 

Rápidamente se hizo conocida entre sus amigos por su arroz con leche, y descubrió una nueva pasión en el proceso. 

«Me enamoré de la repostería, de la cocina y de todo», dice Clara. Empezó a investigar cómo desarrollar un plan de negocio y fue entonces cuando conoció los talleres de emprendimiento que ofrecía Cuso International en Cali, Colombia.

Además de ofrecer formación en desarrollo empresarial, gestión financiera y mercadeo, Cuso puso a Clara en contacto con otras propietarias de pequeñas empresas que habían estado en circunstancias similares. Conocer y aprender de otras empresarias fue el empujón que Clara necesitaba para hacer realidad su sueño.

«Superé los miedos de tener mi propio local al ver que otras personas lo estaban haciendo. Algunas de ellas ya habían avanzado bastante con su negocio. Y me lancé a ello», dice Clara. «Me dio la confianza necesaria para abrir mi propio negocio, porque a veces, como microempresaria, crees que no puedes lograrlo».

Lo que empezó como un pequeño negocio de postres caseros en su cocina es ahora una bulliciosa tienda en Cali, Colombia. La Vaca Rosada es una animada y dinámica pastelería y espacio para eventos. Y aunque Clara está muy feliz por su éxito, no es lo que más le enorgullece.

«De lo que estoy más orgullosa es de estar dando un buen ejemplo a mis hijos. Les estoy enseñando que, con esfuerzo y dedicación, se pueden conseguir cosas.»

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